¿estamos ante el fin del I+D?
¿estamos
ante el fin del I+D? La pregunta es más que pertinente. La respuesta es no. En
cambio estamos en una etapa distinta de
la que I+D se confundía con I+D + i. En las últimas décadas la i pequeña
adquirió vida propia. Las empresas podían innovar sin ser líderes en I+D y las
empresas que invertían mucho en I+D no necesariamente eran las más innovadoras.
La mayoría de las empresas con mucha capacidad de I+D son empresas innovadoras
pero no por correlación directa. Quizás todo empieza con la famosa frase de
Jobs comparando en los años ochenta la innovación entre IBM y Apple:
ante el fin del I+D? La pregunta es más que pertinente. La respuesta es no. En
cambio estamos en una etapa distinta de
la que I+D se confundía con I+D + i. En las últimas décadas la i pequeña
adquirió vida propia. Las empresas podían innovar sin ser líderes en I+D y las
empresas que invertían mucho en I+D no necesariamente eran las más innovadoras.
La mayoría de las empresas con mucha capacidad de I+D son empresas innovadoras
pero no por correlación directa. Quizás todo empieza con la famosa frase de
Jobs comparando en los años ochenta la innovación entre IBM y Apple:
“Innovation has nothing to do with how many
R&D dollars you have. When Apple came up with the Mac, IBM was spending at
least 100 times more on R&D. It’s not about
money. It’s about the people you have, how you’re led, and how much you get it.”
R&D dollars you have. When Apple came up with the Mac, IBM was spending at
least 100 times more on R&D. It’s not about
money. It’s about the people you have, how you’re led, and how much you get it.”
A parte de dinero invertido en
I+D la innovación necesita otra mirada entre los que la impulsan. Necesita
lateralidad. A veces necesita entender menos de algo pero tener la mente mucho
más abierta. La innovación requiere de gente que no sepa la lista de
imposibles, de innovadores que desafían las culturas corporativas basadas en
éxitos pasados y las sentencias del “no inventado aquí”.
I+D la innovación necesita otra mirada entre los que la impulsan. Necesita
lateralidad. A veces necesita entender menos de algo pero tener la mente mucho
más abierta. La innovación requiere de gente que no sepa la lista de
imposibles, de innovadores que desafían las culturas corporativas basadas en
éxitos pasados y las sentencias del “no inventado aquí”.
La innovación abierta llegó para
quedarse y ser mainstream en la forma
de innovar. Tanto es así que algunas empresas incluso se desprendieron o
redujeron mucho sus departamento de I+D. Lo importante era saber aplicar el
conocimiento nuevo más que crearlo. Además, juntar talento interno y talento
externo parece de sentido común.
quedarse y ser mainstream en la forma
de innovar. Tanto es así que algunas empresas incluso se desprendieron o
redujeron mucho sus departamento de I+D. Lo importante era saber aplicar el
conocimiento nuevo más que crearlo. Además, juntar talento interno y talento
externo parece de sentido común.
Sin embargo, no hay que olvidar
que muchos departamentos de I+D fueron claves para entender la revolución tecnológica
que emergió en los ochenta pero que llevaba gestándose en laboratorios de I+D
míticos, como el de Bell o el de Xerox, treinta o cuarenta años antes. No toda
la innovación surge en meses. Igual que no todo el I+D acaba en innovación por
años que un proyecto pueda llevar. Los departamentos corporativos de I+D
jugaron en el siglo XX un papel fundamental. ¿También lo jugarán en el siglo
XXI?
que muchos departamentos de I+D fueron claves para entender la revolución tecnológica
que emergió en los ochenta pero que llevaba gestándose en laboratorios de I+D
míticos, como el de Bell o el de Xerox, treinta o cuarenta años antes. No toda
la innovación surge en meses. Igual que no todo el I+D acaba en innovación por
años que un proyecto pueda llevar. Los departamentos corporativos de I+D
jugaron en el siglo XX un papel fundamental. ¿También lo jugarán en el siglo
XXI?
¿qué factores serían importantes
para dar sentido a un departamento de I+D en nuestros días? Aquí van algunas
sugerencias:
para dar sentido a un departamento de I+D en nuestros días? Aquí van algunas
sugerencias:
1. que
esté muy focalizado estratégicamente. Que huya del conocimiento “commodity” que
le pueda venir de fuera. Que se centre en franjas de conocimiento de su negocio
actual o de negocios futuros en los que ellos puedan desarrollar una investigación
diferencial. El factor de diferenciación es clave.
esté muy focalizado estratégicamente. Que huya del conocimiento “commodity” que
le pueda venir de fuera. Que se centre en franjas de conocimiento de su negocio
actual o de negocios futuros en los que ellos puedan desarrollar una investigación
diferencial. El factor de diferenciación es clave.
2. que
sepa clusterizar y usar el conocimiento que universidades, centros de
investigación y otras empresas les puedan proveer. Debe ser un I+D que tenga,
en ese sentido, el mismo espíritu de la innovación abierta.
sepa clusterizar y usar el conocimiento que universidades, centros de
investigación y otras empresas les puedan proveer. Debe ser un I+D que tenga,
en ese sentido, el mismo espíritu de la innovación abierta.
que haga
un uso inteligente y ágil de la propiedad intelectual, reservándola o
abriéndola a partir de criterios muy prácticos.
un uso inteligente y ágil de la propiedad intelectual, reservándola o
abriéndola a partir de criterios muy prácticos.
3. que
despliegue un “pipeline” con objetivos diversos. Algunos más de corto plazo y pegados
a negocios cercanos. Otros más de medio y largo plazo, que se inspiren en las
visiones a largo de su compañía y que tengan a su vez capacidad de inspirar
estrategias futuras.
despliegue un “pipeline” con objetivos diversos. Algunos más de corto plazo y pegados
a negocios cercanos. Otros más de medio y largo plazo, que se inspiren en las
visiones a largo de su compañía y que tengan a su vez capacidad de inspirar
estrategias futuras.
4. que
pueda plantearse con naturalidad vender sus servicios a otras empresas, e
incluso en según que condiciones a la competencia (como magistralmente lo ha
hecho Enric Barba en el Grupo Cirsa).
pueda plantearse con naturalidad vender sus servicios a otras empresas, e
incluso en según que condiciones a la competencia (como magistralmente lo ha
hecho Enric Barba en el Grupo Cirsa).
5. que
aproveche los recursos públicos de fondos competitivos para el I+D pero 6. que
no sea “follower” de los mismos si no de la estrategia de su empresa.
aproveche los recursos públicos de fondos competitivos para el I+D pero 6. que
no sea “follower” de los mismos si no de la estrategia de su empresa.
7. que
explore aquellas tecnologías que pueden disrumpir su negocio, para poder
desarrollar estrategias alternativas o para liderar el propio cambio en su
sector.
explore aquellas tecnologías que pueden disrumpir su negocio, para poder
desarrollar estrategias alternativas o para liderar el propio cambio en su
sector.
8. que huya
de las burocracias del I+D.
de las burocracias del I+D.
9. que
tenga una cultura orientada a resultados, no a “papers”. Los “papers” se hacen
en la universidad y deben saber aprovecharse. Pero un departamento de I+D de
una empresa no es una universidad.
tenga una cultura orientada a resultados, no a “papers”. Los “papers” se hacen
en la universidad y deben saber aprovecharse. Pero un departamento de I+D de
una empresa no es una universidad.
10. que
sea radicalmente meritocrático en su gestión de talento.
sea radicalmente meritocrático en su gestión de talento.
Los departamentos de I+D, los
centros tecnológicos de grandes empresas, no solamente pueden tener sentido
todavía hoy, pueden ser verdaderos motores de cambio y transformación. Pero
para ello, deben participar de una cultura abierta y no perder de vista que su
propósito es crear conocimiento útil para su empresa y para la sociedad. Además
pueden ser una plataforma de incubación de proyectos que sin perder la
orientación a resultados huyan del cortoplacismo. Para hagan todo ello,
necesitarán ser liderados por directivos que sepan sintetizar muchas miradas a
la vez: las internas de la empresa, la de los clientes, la de los
mercados, la de las tendencias y las
disrupciones tecnológicas, la de las nuevas lógicas de conocimiento surgidas de
la investigación. Con talento y este tipo de liderazgos es posible hacer de
estos centros motores de transformación de las empresas que los han creado.
centros tecnológicos de grandes empresas, no solamente pueden tener sentido
todavía hoy, pueden ser verdaderos motores de cambio y transformación. Pero
para ello, deben participar de una cultura abierta y no perder de vista que su
propósito es crear conocimiento útil para su empresa y para la sociedad. Además
pueden ser una plataforma de incubación de proyectos que sin perder la
orientación a resultados huyan del cortoplacismo. Para hagan todo ello,
necesitarán ser liderados por directivos que sepan sintetizar muchas miradas a
la vez: las internas de la empresa, la de los clientes, la de los
mercados, la de las tendencias y las
disrupciones tecnológicas, la de las nuevas lógicas de conocimiento surgidas de
la investigación. Con talento y este tipo de liderazgos es posible hacer de
estos centros motores de transformación de las empresas que los han creado.
Este post se publicó en Sintetia el 21 de septienbre de 2015
La imagen pertenece a una obra del Rosso Fiorentino