Si
todos los que hablan de innovación y emprendimiento se aplicaran el cuento
seguro que nuestras organizaciones serían mucho más competitivas y nuestro
mundo sería mejor. Pero entre las palabras y la acción hay un gap que se
agranda cuando hay una gran inflación de discurso como es el caso que nos
ocupa. En tres años o antes, el soufflé de la innovación y el emprendimiento
habrá bajado y entonces, dado que la necesidad será la misma que hoy, solamente
permanecerán los resultados, el esfuerzo y la convicción de que, más allá de
las modas, este es un camino duro pero ilusionante, de estar en las
organizaciones y en la sociedad. Se irá
el humo quedarán las trayectorias y los resultados.
todos los que hablan de innovación y emprendimiento se aplicaran el cuento
seguro que nuestras organizaciones serían mucho más competitivas y nuestro
mundo sería mejor. Pero entre las palabras y la acción hay un gap que se
agranda cuando hay una gran inflación de discurso como es el caso que nos
ocupa. En tres años o antes, el soufflé de la innovación y el emprendimiento
habrá bajado y entonces, dado que la necesidad será la misma que hoy, solamente
permanecerán los resultados, el esfuerzo y la convicción de que, más allá de
las modas, este es un camino duro pero ilusionante, de estar en las
organizaciones y en la sociedad. Se irá
el humo quedarán las trayectorias y los resultados.
Mientras
tanto, estaría bien que todos aquellos que hablamos de innovación y
emprendimiento nos aplicáramos la medicina que recetamos:
tanto, estaría bien que todos aquellos que hablamos de innovación y
emprendimiento nos aplicáramos la medicina que recetamos:
1. Creer que las ideas son una commodity. Las nuestras también. Lo importante no es
tener ideas si no capacidad para concretar aquellas que son realmente una
oportunidad.
tener ideas si no capacidad para concretar aquellas que son realmente una
oportunidad.
2. El tener experiencias de riesgo
innovador/emprendedor. Los que hablamos de esto tenemos más legitimidad si
hemos invertido tiempo y dinero en proyectos de los que hemos aprendido. Hablar
de la poética del fracaso tiene otro tono si uno lo ha probado, lo digo por
experiencia.
innovador/emprendedor. Los que hablamos de esto tenemos más legitimidad si
hemos invertido tiempo y dinero en proyectos de los que hemos aprendido. Hablar
de la poética del fracaso tiene otro tono si uno lo ha probado, lo digo por
experiencia.
3. La apertura mental. También para con
aquellos que ven con una perspectiva distinta a la nuestra la innovación y el
emprendimiento. No construir ortodoxias entorno a la innovación parece sensato,
así como el mantener una cierta capacidad de reírnos de nosotros mismos.
aquellos que ven con una perspectiva distinta a la nuestra la innovación y el
emprendimiento. No construir ortodoxias entorno a la innovación parece sensato,
así como el mantener una cierta capacidad de reírnos de nosotros mismos.
4. Innovar en innovación. Demostrar cada
día a nuestros clientes y a nosotros mismos que no solamente hablamos de
innovación si no que cuestionamos nuestras metodologías y herramientas para
crear nuevas soluciones que aporten más valor.
día a nuestros clientes y a nosotros mismos que no solamente hablamos de
innovación si no que cuestionamos nuestras metodologías y herramientas para
crear nuevas soluciones que aporten más valor.
5. Compartir lo que aprendemos. Si nos
creemos lo de la innovación abierta no podemos ser cerrados ni tener miedo a
compartir lo que aprendemos, además, es la mejor forma para no estancarse, para
no instalarse en zonas de confort.
creemos lo de la innovación abierta no podemos ser cerrados ni tener miedo a
compartir lo que aprendemos, además, es la mejor forma para no estancarse, para
no instalarse en zonas de confort.
6.
La orientación a resultados.
Esforzarnos en diferenciarnos de los que hablan de innovación y emprendimiento
desde los discursos escritos o tomados de otros, con una casi obsesiva alerta
que la innovación y el emprendimiento carecen de sentido si no impactan en
resultados tangibles. Huir de los aduladores de la innovación y el
emprendimiento que son incapaces de arriesgar nada de su bolsillo o de sus
posiciones en las organizaciones.
La orientación a resultados.
Esforzarnos en diferenciarnos de los que hablan de innovación y emprendimiento
desde los discursos escritos o tomados de otros, con una casi obsesiva alerta
que la innovación y el emprendimiento carecen de sentido si no impactan en
resultados tangibles. Huir de los aduladores de la innovación y el
emprendimiento que son incapaces de arriesgar nada de su bolsillo o de sus
posiciones en las organizaciones.
7. Co –crear la innovación con los clientes.
Huir de recetas y del cortar y pegar. Pensar con el cliente. Pivotear cuando
haga falta. Aprender. Humildad. Cada cliente es distinto y merece experiencias
únicas para dar resultados que se ajusten a su cultura y su estrategia.
Huir de recetas y del cortar y pegar. Pensar con el cliente. Pivotear cuando
haga falta. Aprender. Humildad. Cada cliente es distinto y merece experiencias
únicas para dar resultados que se ajusten a su cultura y su estrategia.
8. El ser creativos. Atrevernos a
desafiar la conexión de puntos que no era obvio conectar y arriesgar a que no
funcione. No ser meros espectadores de cómo innovan o emprenden los demás para
corregirlos. Proponer ideas locas (aquellas que nos da vergüenza expresar) para
forzar una cierta radicalidad que nos saque de lo esperable e inercial, del
confort de lo razonable y previsible.
desafiar la conexión de puntos que no era obvio conectar y arriesgar a que no
funcione. No ser meros espectadores de cómo innovan o emprenden los demás para
corregirlos. Proponer ideas locas (aquellas que nos da vergüenza expresar) para
forzar una cierta radicalidad que nos saque de lo esperable e inercial, del
confort de lo razonable y previsible.
9. Tener foco. Marear la perdiz lo
suficiente, no más. Ayudar y ayudarnos a centrar el foco de la innovación es
vincularla mejor a la estrategia, a dónde nuestros clientes o nosotros mismos
queremos estar en el futuro que construimos.
suficiente, no más. Ayudar y ayudarnos a centrar el foco de la innovación es
vincularla mejor a la estrategia, a dónde nuestros clientes o nosotros mismos
queremos estar en el futuro que construimos.
10. La obsolescencia programada. Deberíamos
pensar en qué vendrá más allá de la innovación y el emprendimiento para
aplicarnos lo mismo que fácilmente recetaríamos a un cliente. La innovación y
el emprendimiento con ser grandes palancas de desarrollo no son el fin de la
historia.
pensar en qué vendrá más allá de la innovación y el emprendimiento para
aplicarnos lo mismo que fácilmente recetaríamos a un cliente. La innovación y
el emprendimiento con ser grandes palancas de desarrollo no son el fin de la
historia.
(la imagen pertenece a una obra de Giovanni Bellini)