Hay
cosas que no se improvisan. La
concentración de talento emprendedor que diferencia ecosistemas de innovación
como el de Boston o California, no se improvisan. En 1946 el primer Venture
Capitalist empezó a actuar en Boston, justo después de la Segunda Guerra
Mundial, durante la cual el MIT había contribuído a desarrollar la tecnología
del radar. No fue una casualidad. La
sinergia entre universidades de primer nivel, de gobiernos que riegan abundantemente
una investigación que se valoriza y un entorno empresarial con ambición y
capacidad de riesgo no se improvisa.
Podemos poner todas la condiciones imaginables (edificios especialmente)
pero sin la habilidad y la paciencia de concentrar talento emprendedor el
ecosistema continuará dando los resultados que dan los artificios. La suma de universidades mediocres o poco
orientadas a valorizar conocimiento, gobiernos sin capacidad de definir
políticas de largo recorrido y tejido empresarial que no piensa en grande no
crea un ecosistema diferencial por muchos parques tecnológicos o incubadoras
que se construyan. ¿de qué sirven incubadoras que regalan metros si no hay
emprendedores genuinos? ¿de qué sirven centros de investigación que no
valorizan nunca? ¿cómo van a vertebrar ecosistemas empresas que no saben
crecer? El desarrollo territorial es un
poco más complicado que inventar una triple hélice en cada esquina coincidiendo
con los mandatos políticos.
cosas que no se improvisan. La
concentración de talento emprendedor que diferencia ecosistemas de innovación
como el de Boston o California, no se improvisan. En 1946 el primer Venture
Capitalist empezó a actuar en Boston, justo después de la Segunda Guerra
Mundial, durante la cual el MIT había contribuído a desarrollar la tecnología
del radar. No fue una casualidad. La
sinergia entre universidades de primer nivel, de gobiernos que riegan abundantemente
una investigación que se valoriza y un entorno empresarial con ambición y
capacidad de riesgo no se improvisa.
Podemos poner todas la condiciones imaginables (edificios especialmente)
pero sin la habilidad y la paciencia de concentrar talento emprendedor el
ecosistema continuará dando los resultados que dan los artificios. La suma de universidades mediocres o poco
orientadas a valorizar conocimiento, gobiernos sin capacidad de definir
políticas de largo recorrido y tejido empresarial que no piensa en grande no
crea un ecosistema diferencial por muchos parques tecnológicos o incubadoras
que se construyan. ¿de qué sirven incubadoras que regalan metros si no hay
emprendedores genuinos? ¿de qué sirven centros de investigación que no
valorizan nunca? ¿cómo van a vertebrar ecosistemas empresas que no saben
crecer? El desarrollo territorial es un
poco más complicado que inventar una triple hélice en cada esquina coincidiendo
con los mandatos políticos.
A mí
entender una de las mejores operaciones de concentración de talento puede llegar
a ser el distrito 22@ de Barcelona. Pero curiosamente el propio Ayuntamiento de
Barcelona se dedicó en el mandato anterior a difuminarlo impulsando una más que
discutible operación en los espacios del Consorcio de la Zona Franca dedicado a
la economía del conocimiento. Un grave error, que tiene más a ver con la
frivolidad que con la estrategia. Los recursos son escasos y hay que consolidar
prioridades. El 22@ podría dar buenos resultados
si hay perseverancia, si se entienden los ciclos y se concentran recursos de
primer nivel.
entender una de las mejores operaciones de concentración de talento puede llegar
a ser el distrito 22@ de Barcelona. Pero curiosamente el propio Ayuntamiento de
Barcelona se dedicó en el mandato anterior a difuminarlo impulsando una más que
discutible operación en los espacios del Consorcio de la Zona Franca dedicado a
la economía del conocimiento. Un grave error, que tiene más a ver con la
frivolidad que con la estrategia. Los recursos son escasos y hay que consolidar
prioridades. El 22@ podría dar buenos resultados
si hay perseverancia, si se entienden los ciclos y se concentran recursos de
primer nivel.
Hay
cosas que solamente pueden ser una consecuencia y no funcionan como un fin. Con
lo innovación pasa lo mismo. Fran Chuan y Jay Rao lo explican muy bien en su
último libro Innovación 2.0.
cosas que solamente pueden ser una consecuencia y no funcionan como un fin. Con
lo innovación pasa lo mismo. Fran Chuan y Jay Rao lo explican muy bien en su
último libro Innovación 2.0.
La
construcción paciente de ecosistemas ricos en talento emprendedor es el camino.
Cambiar culturas, optar por caminos propios, apoyar a los serios, reconocer a los que arriesgan y saber que hay viajes
que requieren constancia y resultados que son una consecuencia.
construcción paciente de ecosistemas ricos en talento emprendedor es el camino.
Cambiar culturas, optar por caminos propios, apoyar a los serios, reconocer a los que arriesgan y saber que hay viajes
que requieren constancia y resultados que son una consecuencia.
(la imagen pertenece a una obra de Joachim Patinir)