Tiene
un hijo de 1 año y otro mayor, su pareja también tiene un trabajo absorbente.
No se queja, sonríe con complicidad. Las cosas están complicadas en su empresa
de servicios para otras empresas, sus
clientes lo pasan mal y ella lo pasa mal de rebote. Además alguna deslealtad
interna le ha complicado la relación con sus principales clientes. Mantiene a
sus 10 colaboradores. Lo remontará, dice. Vuelve a sonreír. Como de pasada me suelta que se levanta a las
4 o las 5 y se a dormir a las 12 enviando mails, intenta cenar con sus hijos
cuando los viajes no lo impiden. Se esfuerza. Le gustaría conciliar, ver a los
suyos, disfrutarlos. Cuando no puede más se acuerda de sus padres y de cómo
trabajaban. Algún día le acompañará el
éxito y, entonces, alguien la mirará como una persona de suerte a la que se lo
han regalado todo. Le parecerá fácil lo que ha construido. Otros la mirarán con
sospecha por ser empresaria.
un hijo de 1 año y otro mayor, su pareja también tiene un trabajo absorbente.
No se queja, sonríe con complicidad. Las cosas están complicadas en su empresa
de servicios para otras empresas, sus
clientes lo pasan mal y ella lo pasa mal de rebote. Además alguna deslealtad
interna le ha complicado la relación con sus principales clientes. Mantiene a
sus 10 colaboradores. Lo remontará, dice. Vuelve a sonreír. Como de pasada me suelta que se levanta a las
4 o las 5 y se a dormir a las 12 enviando mails, intenta cenar con sus hijos
cuando los viajes no lo impiden. Se esfuerza. Le gustaría conciliar, ver a los
suyos, disfrutarlos. Cuando no puede más se acuerda de sus padres y de cómo
trabajaban. Algún día le acompañará el
éxito y, entonces, alguien la mirará como una persona de suerte a la que se lo
han regalado todo. Le parecerá fácil lo que ha construido. Otros la mirarán con
sospecha por ser empresaria.
No
todos los empresarios viven media jornada en el golf y la otra media en comidas
que acaban con sobremesas opíparas. Hay que discernir, hay de todo. Algunos hacen jornadas
de 16 horas o más. Sin quejas, es su opción, nadie les obliga. No hay que tratarlos como
héroes. Pero quizás con un poco más de respeto sí.
todos los empresarios viven media jornada en el golf y la otra media en comidas
que acaban con sobremesas opíparas. Hay que discernir, hay de todo. Algunos hacen jornadas
de 16 horas o más. Sin quejas, es su opción, nadie les obliga. No hay que tratarlos como
héroes. Pero quizás con un poco más de respeto sí.
(el detalle es de P. Christus)