Os propongo compartir algunos de los pensamientos que brotaron hace unas semanas en el seminario Open Innovation and Corporate Enterpreneurship que cursé en la Haas Business School de la UC Berkeley, con los profesores Jerry Engel, Henry Chesbrough, David Charron. No son los contenidos del curso sino simplemente las notas que he ido tomando y que os presento a modo de “zibaione” o “escudella” de innovación y emprendimiento:
1. La diferencia entre el póquer y el ajedrez en los negocios (ver post anterior). La consistencia de Xerox la lleva al ajedrez, la avidez estratégica de Procter & Gamble la lleva a crear “innonvation scouts” y abrir sus iniciativas de innovación más allá de su compañía, Open Innovation. La solidez de los argumentos de Chesbrough es impresionante, así como su descripción del papel de los intermediarios en la Open Innovation, conocía sus libros pero no sus study cases y son excelentes.
2. La governance juega un papel clave en los procesos de innovación (en el proceso de toma de decisiones hay una de les grandes diferencias entre la start up y el Corporate Enterpreneurship, pero es especialmente relevante en las reacciones sobre los proyectos falsos positivos y especialmente sore los falsos negativos). La governance es tempo y la velocidad en algunos nuevos negocios es clave.
3. La Corporate enterpreneurship es tan sexy como compleja. Al desarrollar el proyecto emprendedor, una start up, a veces, la complejidad aumenta más que la capacidad de aprender. Por ello, resulta fundamental saber dar entrada a expertos en gestión en el momento oportuno (ni antes porqué es un coste neto, ni después porqué es un coste de oportunidad).
4. ¿Cómo vamos a hacer un Silicon Valley en Europa si lo queremos sin riesgo? Hay que inyectar esta cultura del riesgo en el ecosistema europeo de innovación. Hablo de riesgo bien entendido, que no es exactamente especulación, que no es “subprime” para entendernos. Este ecosistema californiano vive de muchas cosas pero tiene una cultura del riesgo y de tolerancia al fracaso como hilo conductor, saber aguantar las fases en que las compañías no ingresan pero se posicionan y se preparan para hacer grandes negocios (o grandes fracasos). Tener claro que de todos lo proyectos que apoyamos algunos resultarán falsos positivos y otros de los que desechamos resultarán falsos negativos. Jerry Engel insiste que este ecosistema era impensable en 1970 en la propia California.
5. El papel de los Business plan también es papel (en Silicon Valley y en Terrassa) y lo aguanta todo, las personas y el modelo de negocio son clave porque hay una fase de adaptación a la realidad que es esencial. El momento de la verdad es atravesar el famoso Chasm de la curva de la innovación. El triángulo tecnología, personas, modelo de negocio es la base del éxito.
6. Diferenciarse es clave pero diferenciarse sostenidamente solamente es posible desde la innovación.
7. Innovación es cambio (vale la pena insistir). Muchas veces la barrera a la innovación es la inercia corporativa que acumula experiencias y genera una historia que a veces impide errores pero a veces genera anticuerpos a la innovación.
8. Muchas empresas USA son muy provincianas pero el mercado interior es muy importante y les permite adquirir masa crítica rápidamente.
9. Los abogados juegan un papel tan importante en la vida y la economía de USA que son cómo una segunda fiscalidad.
10. He conocido “serial entrepreneur” que se excitan más creando empresas que gastando el mucho dinero que han acumulado, ganan más y más porque para ellos este deporte de riesgo se ha convertido en su vida. A mí me fascinan por su frescura y iniciativa, pero entiendo que algunos los detesten porqué hay quién le pone un punto de chulería y arrogancia completamente innecesaria. El fundador de los famosos almacenes Macy’s fracasó seis veces antes de dar en el clavo, lo que es realmente tenacidad en serie.
11. Berkeley no está en el centro de Silicon Valley como Stamford pero la gente sale de aquí con hambre de emprender y eso es vital. Nuestras universidades europeas consiguen que muy pocos estudiantes salgan con esta hambre, la mayoría salen con hambre de salario y si puede ser estabilidad (candidatos a funcionario, sea dicho con todo el respeto a mis amigos y familiares funcionarios).
12. Creo que nunca podré ir a una universidad de prestigio sin que alguien me pregunte por Paco Solé Parellada.
¿Y el curso?
El curso realmente es extraordinario, y la gente con la que hemos compartido aula, muy interesante.
¿Y Berkeley?
Berkeley es Berkeley, con su Campus mítico nacido en 1868, poblado de árboles y de los viejos ecos de la contestación a Vietnam y más recientemente a Iraq. Berkeley de los Bears y de su sana rivalidad con Stamford (en la students store lo primero que veo es una camiseta que pone “Beat Stamford”). Berkeley de los homeless y de los conciertos de Jazz gratis los miércoles al mediodía. Berkeley oriental, muy lleno de asiáticos. Se come regular tirando a mal pero se aprende mucho.
Poder ver cómo cambiaba el mundo desde Berkeley fue también impresionante, ver sus calificativos a los financieros de Wall Street y ver su perplejidad ante las decisiones que el Estado tomaba para equilibrar el sistema, cuando toda la vida creían que el Estado era un mal menor del sistema ha sido también impresionante. El mundo ha cambiado pero creo que lo que aprendí estos días en Berkeley me servirá más todavía. Pasé lo que pase habré que emprender e innovar, quizás más que antes.
1. La diferencia entre el póquer y el ajedrez en los negocios (ver post anterior). La consistencia de Xerox la lleva al ajedrez, la avidez estratégica de Procter & Gamble la lleva a crear “innonvation scouts” y abrir sus iniciativas de innovación más allá de su compañía, Open Innovation. La solidez de los argumentos de Chesbrough es impresionante, así como su descripción del papel de los intermediarios en la Open Innovation, conocía sus libros pero no sus study cases y son excelentes.
2. La governance juega un papel clave en los procesos de innovación (en el proceso de toma de decisiones hay una de les grandes diferencias entre la start up y el Corporate Enterpreneurship, pero es especialmente relevante en las reacciones sobre los proyectos falsos positivos y especialmente sore los falsos negativos). La governance es tempo y la velocidad en algunos nuevos negocios es clave.
3. La Corporate enterpreneurship es tan sexy como compleja. Al desarrollar el proyecto emprendedor, una start up, a veces, la complejidad aumenta más que la capacidad de aprender. Por ello, resulta fundamental saber dar entrada a expertos en gestión en el momento oportuno (ni antes porqué es un coste neto, ni después porqué es un coste de oportunidad).
4. ¿Cómo vamos a hacer un Silicon Valley en Europa si lo queremos sin riesgo? Hay que inyectar esta cultura del riesgo en el ecosistema europeo de innovación. Hablo de riesgo bien entendido, que no es exactamente especulación, que no es “subprime” para entendernos. Este ecosistema californiano vive de muchas cosas pero tiene una cultura del riesgo y de tolerancia al fracaso como hilo conductor, saber aguantar las fases en que las compañías no ingresan pero se posicionan y se preparan para hacer grandes negocios (o grandes fracasos). Tener claro que de todos lo proyectos que apoyamos algunos resultarán falsos positivos y otros de los que desechamos resultarán falsos negativos. Jerry Engel insiste que este ecosistema era impensable en 1970 en la propia California.
5. El papel de los Business plan también es papel (en Silicon Valley y en Terrassa) y lo aguanta todo, las personas y el modelo de negocio son clave porque hay una fase de adaptación a la realidad que es esencial. El momento de la verdad es atravesar el famoso Chasm de la curva de la innovación. El triángulo tecnología, personas, modelo de negocio es la base del éxito.
6. Diferenciarse es clave pero diferenciarse sostenidamente solamente es posible desde la innovación.
7. Innovación es cambio (vale la pena insistir). Muchas veces la barrera a la innovación es la inercia corporativa que acumula experiencias y genera una historia que a veces impide errores pero a veces genera anticuerpos a la innovación.
8. Muchas empresas USA son muy provincianas pero el mercado interior es muy importante y les permite adquirir masa crítica rápidamente.
9. Los abogados juegan un papel tan importante en la vida y la economía de USA que son cómo una segunda fiscalidad.
10. He conocido “serial entrepreneur” que se excitan más creando empresas que gastando el mucho dinero que han acumulado, ganan más y más porque para ellos este deporte de riesgo se ha convertido en su vida. A mí me fascinan por su frescura y iniciativa, pero entiendo que algunos los detesten porqué hay quién le pone un punto de chulería y arrogancia completamente innecesaria. El fundador de los famosos almacenes Macy’s fracasó seis veces antes de dar en el clavo, lo que es realmente tenacidad en serie.
11. Berkeley no está en el centro de Silicon Valley como Stamford pero la gente sale de aquí con hambre de emprender y eso es vital. Nuestras universidades europeas consiguen que muy pocos estudiantes salgan con esta hambre, la mayoría salen con hambre de salario y si puede ser estabilidad (candidatos a funcionario, sea dicho con todo el respeto a mis amigos y familiares funcionarios).
12. Creo que nunca podré ir a una universidad de prestigio sin que alguien me pregunte por Paco Solé Parellada.
¿Y el curso?
El curso realmente es extraordinario, y la gente con la que hemos compartido aula, muy interesante.
¿Y Berkeley?
Berkeley es Berkeley, con su Campus mítico nacido en 1868, poblado de árboles y de los viejos ecos de la contestación a Vietnam y más recientemente a Iraq. Berkeley de los Bears y de su sana rivalidad con Stamford (en la students store lo primero que veo es una camiseta que pone “Beat Stamford”). Berkeley de los homeless y de los conciertos de Jazz gratis los miércoles al mediodía. Berkeley oriental, muy lleno de asiáticos. Se come regular tirando a mal pero se aprende mucho.
Poder ver cómo cambiaba el mundo desde Berkeley fue también impresionante, ver sus calificativos a los financieros de Wall Street y ver su perplejidad ante las decisiones que el Estado tomaba para equilibrar el sistema, cuando toda la vida creían que el Estado era un mal menor del sistema ha sido también impresionante. El mundo ha cambiado pero creo que lo que aprendí estos días en Berkeley me servirá más todavía. Pasé lo que pase habré que emprender e innovar, quizás más que antes.